Sobre el hecho que comentas de haber tenido anteriormente coches automáticos que se comportan de forma diferente, decirte que existen 4 tipos de tecnologías de cajas de cambio "automáticas", cada una con sus virtudes y sus defectos.
- Cajas de cambios automáticas con convertidor de par: son los primeros tipos de cambios automáticos que existieron, son complejas, pesadas, elevan el consumo, requieren mantenimiento, no son especialmente rápidas, resbalan, etc. A cambio proporcionan una marcha "suave" y son capaces de transmitir grandes cantidades de par. Son las cajas típicas que han llevado las berlinas europeas y americanas: mercedes, bwm, audi, etc. Si has subido en un mercedes 300 automático de los antiguos has probado una de estas cajas.
- Cajas de cambios con variador continuo: es el tipo de cambio que de toda la vida se ha usado en ciclomotores, pero que sobre todo en coches japoneses se ha sabido transportar al mundo del automóvil. Es bastante más rápido que el cambio con convertidor de par y consume menos, sin embargo tienen tendencia a revolucionar los motores mucho al acelerar y a buscar la marcha más larga en el momento que levantas el pie del acelerador. El confort no es malo, salvo en momentos puntuales. Por ejemplo, es la caja que llevan algunos Toyota. Yo he probado un Auris 132CV de gasolina con esta tecnología de caja y, personalmente, no me ha gustado nada.
- Cajas de cambio manuales pilotadas: es la respuesta de varias marcas europeas (PSA, Renault, ...), a la necesidad de un cambio más ligero y más barato que los cambios tradicionales. A todos los efectos, las cajas manuales pilotadas, son cajas manuales que se han "robotizado" mediante un sistema electrónico. Su principal inconveniente es que no son igual de suaves que las cajas tradicionales con convertidor, que requieren una curva de adaptación importante y que no son especialmente rápidas. Hay que procurar levantar el pie del acelerador para acompañar el "cambio de marcha". No la he probado, pero con ver el vídeo de arriba tengo suficiente.
- Cajas de cambio de doble embrague: como su propio nombre indica es una caja que tiene dos embragues , uno para las marchas pares y otro para las impares, y un sistema electrónico de control, como el de las CMP. El tener dos embragues permite una transición muchísimo más rápida (décimas de segundo), mucha mayor suavidad (no se produce desaceleración), menor consumo, etc. El problema es que cuestan más que las manuales pilotadas de un único embrague, por motivos obvios. Esta caja es la que está montado Ford, con su powershift, grupo volkswagen con los DSG, Mercedes con el DCT, etc. Ahora mismo, en mi opinión, he probado la de Ford, y el doble embrague es la mejor opción en automático. No obstante, no es la más barata y por eso tienen cabida las opciones como las CMP/ETG de PSA.